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Mostrando entradas de febrero, 2012

PALABRAS DE FRUSTRACIÓN O INGENUIDAD.

Siempre e inevitablemente todos subestiman el número de individuos estúpidos en circulación. A primera vista esta afirmación puede parecer trivial, o más bien obvia, o poco generosa, o quizá las tres cosas a la vez. Menciono lo anterior dado que en política antes que hablar hay que razonar lo que se va a decir, pues siempre será cuestionado y analizado entre líneas el mensaje y el discurso de los políticos sin cortapisas y sin simulación ante cualquier medio de comunicación. Este es el parco error del dirigente estatal del PAN Juan Carlos Mondragon Quintana, quien el pasado fin de semana señalará ante medios de comunicación la supuesta ingerencia del Secretario General de Gobierno para pactar un acuerdo en las candidaturas al Senado en Puebla para Acción Nacional y con ello beneficiar en la prodigiosa posición uno a Javier Lozano Alarcon. Esta penosa declaración sacada de la manga por un personaje de poca monta parece ser más una muestra de frustración y recelo que de madurez y se

Es tiempo de ganarle a la mediocridad.

México tiene todo para triunfar, para ser exitoso, para sacudir a la criminalidad de una vez por todas y darle a las nuevas generaciones mayores oportunidades de desarrollo y tranquilidad; lamentablemente el lastre de la corrupción y la medianía de gran parte de los gobernantes en los niveles locales hacen parecer aún lejano un México diferente. Este es el contexto en la recta final en el marco de la elección presidencial. Marco en donde el camino en el que estamos entrampados hace por demás riesgoso el futuro, toda vez que no se están satisfaciendo los requerimientos mínimos de empleo, seguridad, oportunidades e ingreso que justamente exige la población. Esta realidad nos exige pensar distinto, enfocar nuestros problemas de maneras novedosas. En una palabra: dejar de pretender la perfección que legítimamente anima a muchas de las propuestas de transformación grandiosa para abocarnos a resolver los problemas inmediatos que son urgentes y necesarios, más allá de las falacias y la reto