Parece fácil decir que son diez años de esta casa editorial, la cual me permitió hace un par de años comentar con ustedes, amables lectores, mis particulares puntos de vista sobre temas que a todos nos interesan, de criticar abiertamente a diversos actores políticos de manera combativa. A ustedes, Gracias.
Diez años se dice fácil aunque fueron diez años de romper paradigmas, de transformar el periodismo en Puebla pero, sobretodo, de convertirlo en un referente diario de la clase política poblana. Han sido diez años de libre expresión, de información veraz; en suma, de la consolidación de un proyecto periodístico sin precedentes en Puebla.
Muchos fuimos testigos y protagonistas de las páginas que día a día hacen historia en nuestra entidad. Fuimos testigos de lamentables incidentes que marcaron a nuestra ciudad, de alegrías y también sinsabores electorales, sociales, económicos y futboleros.
A través de sus notas siempre puntuales los poblanos hicimos patente el derecho que tenemos para informarnos sobre el actuar de nuestras autoridades y, al mismo tiempo, a través de su crítica, hemos reflexionado sobre la ciudad, sobre el estado que queremos.
Diez años de consolidar un proyecto editorial, y hoy de investigación, tan importante no es fácil; han sido muchas las plumas que han dado vida y vitalizan día a día esta gran empresa; para ellos mi afecto y más alto reconocimiento por darle un toque especial al periodismo en Puebla, por hacer del “periodismo intolerante” ese ingrediente que da sabor a Puebla.
A sus directores los felicito por esa visión emprendedora que los caracteriza y ha sido la pauta para darle a los poblanos una noticia fresca y con contenidos innovadores, mezcla de experiencia y juventud.
Diez años se dice fácil aunque fueron diez años de romper paradigmas, de transformar el periodismo en Puebla pero, sobretodo, de convertirlo en un referente diario de la clase política poblana. Han sido diez años de libre expresión, de información veraz; en suma, de la consolidación de un proyecto periodístico sin precedentes en Puebla.
Muchos fuimos testigos y protagonistas de las páginas que día a día hacen historia en nuestra entidad. Fuimos testigos de lamentables incidentes que marcaron a nuestra ciudad, de alegrías y también sinsabores electorales, sociales, económicos y futboleros.
A través de sus notas siempre puntuales los poblanos hicimos patente el derecho que tenemos para informarnos sobre el actuar de nuestras autoridades y, al mismo tiempo, a través de su crítica, hemos reflexionado sobre la ciudad, sobre el estado que queremos.
Diez años de consolidar un proyecto editorial, y hoy de investigación, tan importante no es fácil; han sido muchas las plumas que han dado vida y vitalizan día a día esta gran empresa; para ellos mi afecto y más alto reconocimiento por darle un toque especial al periodismo en Puebla, por hacer del “periodismo intolerante” ese ingrediente que da sabor a Puebla.
A sus directores los felicito por esa visión emprendedora que los caracteriza y ha sido la pauta para darle a los poblanos una noticia fresca y con contenidos innovadores, mezcla de experiencia y juventud.
Enhorabuena.
Éxito y muchos años más de irreverencia.
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