Arranca el 2010 y con ello los festejos del Bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución; con él también los nuevos impuestos, que resentirán tanto pobres como ricos, en un contexto de escasez de empleo, baja inversión y un consumo deprimido; un año más en donde cerca de 10 millones de jóvenes en edad de asistir al bachillerato y a la universidad no lo harán por falta de recursos económicos; un año con 30 mil nuevos pobres en la capital poblana, es decir, un promedio de 3 mil 750 por mes, 125 todos los días.
Arranca un año con un ambiente político enrarecido y bastante fétido, en donde la clase política hará hasta lo imposible por reconquistar el voto de los poblanos, el PRI arrancará por dar el último jalón a su negociación política para impedir una ruptura y conservar los 10 puntos de ventaja que una posible alianza Doger-Zavala le permitan al delfín del marinismo definir una elección constitucional pese a la disidencia que ya empieza a fracturarlos en su interior; el PAN por su parte, replanteará su estrategia electoral para no repetir sus últimos fracasos, lo cual sólo será posible si sus más connotados militantes dejarán de lado su altivez como el caso particular de Ana Teresa Aranda quien nada tiene que hacer en la candidatura por la gubernatura, pues eso del empate técnico como mencionará Arturo Rueda “El Nigromante” nadie se la tragó, pues simple y sencillamente como bien señalara el día de ayer Enrique Núñez en su columna Contracara “si al PAN no le alcanza para ganar la gubernatura, sí le alcanza para ganar la Presidencia Municipal” y será nada menos que el llamado “Tigre”, el Senador Humberto Aguilar Coronado, quien por cierto ya se encuentra en el ánimo de los poblanos, el que dispute seguramente la Alcaldía en contra del más débil de los postulados del tricolor, Mario Montero Serrano, en lo que se antoja será un acuerdo político al más alto nivel.
En cuanto a acciones de gobierno se trata, la demagogia y el oportunismo serán las principales cartas de presentación del gobernador Marín y la presidenta municipal, así mientras el primero prepara con bombo y platillo su gira del adiós por el interior del estado una vez que rinda su quinto y último informe de gobierno. Blanca Alcalá anunciará magnas obras con tal de justificar dos años de ineficiencia en la gestión pública, sobre todo en el combate a la pobreza urbana. Otro fracaso que se antoja, será la supuesta reubicación de los locatarios del Mercado Venustiano Carranza, ubicado a un paso del Paseo Bravo, para transformarlo no sólo en una “magna galería de arte” sino en la copia fiel del histórico y bello Mercado de San Miguel de Madrid España, según fuentes nos han informado, ya que nuestra Presidenta anhelará darle a este sitio mayor personalidad para escribir en Puebla una nueva página de su historia, respondiendo así a su reciente interés por la gastronomía poblana con el denominado “Corredor Gastronómico” en la jungla de lo que fueran los famosos terrenos expropiados a la Familia Matanzo ubicados en la 4 poniente y 13 norte.
A todo ello, ya para rematar el inicio de este 2010 agreguemos la hipocresía de una Iglesia que protege no sólo a ladrones de arte sacro sino ahora a ministros de culto lujuriosos, noticia que han dado a conocer los medios de comunicación esta semana.
En fin, sólo resta desearle a Usted amable lector, mis mejores deseos para este 2010 y mi gratitud por dedicarle un minuto de su lectura a esta columna que es escrita por ustedes y para ustedes.
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